El día de la Bestia

El día de la Bestia o… “El poder de las creencias”… (En este caso, locas...).

“Vivimos” nuestras creencias y desde ellas, en transparencia, de manera inconsciente, la mayor parte del tiempo. Estas dirigen nuestras acciones o, dicho de otro modo, realizamos nuestras acciones con un sentido coherente con nuestras creencias. Hay creencias nucleares, y otras más superficiales. Cuanto más nos identifiquemos con una creencia, mas difícil es verla, cuestionarla y modificarla o incluso desecharla…

El curita del Día de la Bestia, Angel, tenía una gran creencia que vivía como verdad: la fecha exacta del nacimiento del Demonio. Eso lo impulso a jugarse lo mas preciado: “la vida eterna”, hizo suya la causa de la salvación del mundo.

Ahora, si bien él infería un lugar basado en otras evidencias
en ningún momento decía como se debería actuar ni qué forma tendría la bestia en su aparición. Al estilo “bebe de Rosemarie” se pensaba en un niño recién nacido, basado e la creencia de que “el diablo” engaña disfrazando sus acciones de cómo si fuera Dios: entonces, si Cristo es Dios y nació pobremente en un pesebre, la bestia nacería, igual que Cristo, en un lugar pobre o marginal de Madrid… y él tendría que matarlo: se trataba de matar a un bebé.

En el debate surgieron temas interesantes como la admiración por quienes “dejan todo” por una causa: la virtud del coraje, por más que por una supuesta “buena causa” se cometieran atrocidades.

La fuerza de una creencia reside en la pasión y perseverancia con que el ejecutor de las acciones coherentes con ella se comporta, de alguna manera, para aquellos quienes sintonizan con su discurso, se produce alguna inspiración que puede llevarles a seguir al “líder”, por más locas que pudieran ser sus ideas.

Si es imposible ver la propia locura (de lo contrario no se estaría loco…) resulta también difícil detectar la locura ajena. Si alguien repite algo con tanta vehemencia, puede que consiga cambiar las creencias de otros y los enrole en su causa? La historia de la Alemania nazi nos muestra que es muy posible, y esto se vio también claramente en “La Ola”.

Cosas de la locura... en su versión mas sombría. Hay otras lucuras mas luminosas, pero eso es otra cuesión.

La locura en este caso es, grosso modo, una "desubicación inconciente". Detectar creencias o ideas locas, como decíamos, para algunos no es fácil, especialmente si se otorga autoridad al que porta el mensaje y lo difunde con vehemencia. El esotérico Cavan compró las ideas del padre Angel, antes tildado de loco. ¿Necesitaba motivación o pasión en una vida aburguesada carente de sentido? ¿Qué lo llevo a perder sus creencias sensatas y abrazar la locura? ¿Ansias demasiado egoicas acaso?

¿Cuánto nos motiva y nos impulsa aquello en lo que creemos?
Estas creencias, desde las cuales actuamos, ¿son “realmente” nuestras?

Vivir las creencias como verdad puede hacernos hacer grandes cosas, tanto milagrosas como peligrosas o destructivas. También puede llevarnos a “usar a los demás como medio” (algo que crisparía al filósofo Kant…) . Es como vivir las opiniones como verdad. La verdad es irrenunciable y somos capaces de (¿casi?) cualquier cosa por hacer prevalecer la verdad que sostenemos... (y que nos sostiene).

Al fin y al cabo y sin ahondar mas en si los protagonistas estaban locos o no (podría esgrimirse alguna duda), parece bastante sensato aceptar nuestra finitud y nuestro potencial para hacer tanto pequeñas como grandes transformaciones… sin dejar de sospechar de toda idea megalómana… Se requiere algo de humildad. Nuevamente, la historia (y las acciones de los líderes políticos), nos recuerda que por lo general, hacer cosas “para salvar al mundo”, no hace más que catalizar emociones iracundas de las masas, como si se tratara de una expiación, y hacer del mundo un lugar un poco (o bastante) peor, generando grandes motivos para el arrepentimiento, y en el mejor de los casos, un doloroso aprendizaje.

Tener dudas es conciencia. Quedarse en ellas no lo es. La duda que tuvo el padre Angel fue arrastrada lo el ímpetu de Cavan... (que no era más que fruto de la propia semilla sembrada por el cura).

En el film, el ajusticiamiento que el padre Angel hace de los “parapoliciales” que pretendían impunemente “Limpiar Madrid” ha sido una casualidad que ni él mismo ni sus cómplices pudieron comprender… No es usual tener tanta suerte…

Estaremos próximamente con otro regimen de proyecciones.

¡Sean bienvenidos sus comentarios y su presencia en próximas presentaciones!

Le fabuleux destin d'Amélie Poulain

“Sans toi, les émotions d’aujourd’hui ne seraient que la peau morte des emotions d’autrefois” ("Sin ti, las emociones de hoy no serían más que la piel muerta de las de ayer").

A mi juicio, una frase que resume el contenido de la película.

Creo que a diferencia de otras filmaciones, Amélie no es para ver sino para ser.

Y la pregunta es: ¿Cuántos de nosotros somos una amélie? tal vez, habría que pensar en las cualidades de una amelié. ¿Qué quiere decir ser una amélie?

En parte alude a fortaleza y fragilidad, dulzura y temor, audacia y placer, una cuota de inocencia con altas dósis de inteligencia. Intuición y ganas de ser en el mundo, de una manera a la que no estamos acostumbrados.

Ser, por ser con el otro, a favor del otro, para aprender y dejar que aprenda. Para construir un mundo solidario y poético que no está excento de frustaciones y penas. Para tomar conciencia de que el "otro" no me es ajeno, sino que es parte de mí. Es mi prójimo.(Del lat. proxĭmus).1. m. Hombre respecto de otro, considerados bajo el concepto de la solidaridad humana. ¿Interesante verdad?

Pero creo que el siglo XXI, nos encuentra justamente en las antípodas de esta postura.

Como si se nos hubiese requebrajado el alma, y eso nos está impidiendo salir de nuestra propia individualidad. Tan frágiles y encerrados como el pintor Raymond Dufayel que ve pasar los días a través de un cuadro de Renoir. Y no es casual que así sea, porque a pesar de todo, su luz llega a todas partes, impartiendo lecciones de poesía, que van más allá de cualquier tecnicismo o tecnicatura. Más su corazón es de cristal. Razón por la cual, está inhibido. El miedo al quiebre es más fuerte. Sin embargo me pregunto: no es una posibilidad que permite que pase el aire nuevo y la luz? ¿El quiebre , en su dimensión profunda, no es acaso la posibilidad única para que el amor se haga presente?

Amélie Poulan, nos pone en el escenario de lo que ella aspira como justicia, para lo cual se enmascara como "El Zorro", y espada en mano va dejando su huella.

¿Es que para ser justos debemos taparnos la cara? ¿Será la ironía de los valientes? ¿el camino del héroe es una posibilidad? más los héroes a veces pagan con la vida... es la diferencia entre ser un Ulises o cualquier otro. El verdadero héroe es el que salva su vida y la de los demás.

Ser una amélie es ser una mariposa, es la metamorfosis de Kafka, es asomarse al mundo, con una mirada fresca dispuesta al servicio, para bienestar del prójimo y de uno mismo.

Por eso elijo terminar mi comentario, al igual que en la película con la misma frase, que nos lleva a grabar en las paredes de nuestra conciencia, que “Sans toi, les émotions d’aujourd’hui ne seraient que la peau morte des emotions d’autrefois” ("Sin ti, las emociones de hoy no serían más que la piel muerta de las de ayer").

La próxima semana, nos encontraremos en nuestro espacio habitual, a las 17.00 hs para compartir "EL DÍA DE LA BESTIA" Sábado 27 de Marzo, en Pacheco 2251.

Entrada $20 (por favor traer cambio)

¡Los invitamos a participar del debate y continuarlo en forma virtual! Toda opinión será bienvenida, en un clima de respeto y de cordial desacuerdo, cuando lo haya.

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La Ola (Die Welle)

¿Qué es la ola? ¿Es un saludo, un grupo, un uniforme, una manera de hacer o de ser? Acaso se trata de todo eso y mucho más. Una ola es dinámica, es imparable, es casi inefable, como tantos procesos sociales e individuales, en contextos humanos...
Una arista a destacar de esta película precisa, concreta, que invita a mirarnos una vez más, es la creencia de poder mantener el control sobre actividades y relaciones humanas. Esto, como se ve en el film, conlleva la semilla de la destrucción.
En todo quehacer humano encontramos un QUÉ, que estructura cierto devenir de acontecimientos. Un observador, al describir los sucesos puede dar cuenta de QUÉ sucede, desde el punto de vista en que está situado.
También emerge un PARA QUÉ... un sentido o propósito para las acciones individuales y grupales... No es sorprendente ver como ese "para qué", en algunos casos, significa un "para confrontar" o "para destruir", junto a un “para que aprendan…” poniendo en el blanco a alguien que ha recibido el mote de "enemigo".
El QUÉ es relativamente sencillo: algo que hay que hacer, algo que sucede, que unifica, algo que genera un espacio para cobijar a quienes buscan saciar su inquietud existencial y sus carencias afectivas, cuando las necesidades básicas de subsistencia están cubiertas. Eso aparece en “La Ola”.
En la mente del profesor Rainer Wenger, el QUÉ es enseñar, y motivar el aprendizaje a través de vivencias, poniendo su ideología en juego, como todos... A alguien pro ANARQUIA le toca enseñar lo que es la AUTOCRACIA: debe haber entonces mucha motivación, para los alumnos y, en especial, para sí mismo.
Y, aunque el QUÉ tiene muchas dimensiones: distintos aspectos a describir o categorizar y el PARA QUÉ global va surgiendo a partir de cierta síntesis de pluralidades… A partir de algunas ideas centrales del docente en la cual los alumnos participan (lo que los hace involucrarse). El gran problema resulta ser el CÓMO. Porque éste subyace y estructura el QUÉ y el PARA QUÉ. El CÓMO es infinito y es el reducto intimo por excelencia de los valores que también orientan el QUÉ y el PARA QUÉ.
El profesor Rainer no pudo más que esbozar y consensuar algunas maneras de hacer y apelar a la creatividad de sus alumnos. Otras “maneras” fueron haciéndose carne a partir de la ebullición de las ideas del alumnado.
¿Cómo se arma una comunidad? La película muestra que se parte de individuos que se tratan como extraños y emerge un líder con buenos discursos que despierta sentimientos de cohesión. El extraño de al lado, ya no lo es más: ahora hay una hermandad, historias y códigos comunes, fines compartidos y, aún cuando éstos sean difusos, lo difuso tambien se comparte y por ende, no se cuestiona.
Sintiendo la pertenencia a la comunidad y viendo que el poder se magnifica al trascender la propia individualidad, una comunidad puede elegir CÓMO darse identidad a sí misma a la vez que a sus miembros... Se pueden cometer actos de vandalismo confrontando con "el afuera". Pero también se puede organizar una campaña solidaria, para un fin aun mayor a la propia comunidad y para ampliar sus lazos y su mensaje.
Nada de esto está bajo control del líder. Las maneras, los CÓMO, son infinitos y complejos. Es imposible abordarlos todos... incluso en una AUTOCRACIA la singularidad se torna ingobernable y puja...
Es por eso que el desastre es predecible, especialmente cuando no se puede acceder ni sujetar el flujo de ideas, interpretaciones y versiones de los hechos: las mentes son, también, tan inefables como la energía que, de aguas, corrientes y vientos, hacen una ola o un tsunami…
Hemos explorado las ansias de poder, la expresión del ego, la etapa vital de los alumnos y profesores, los espacios de contención y libertad… La esperanza a veces recibe un jaque, pero no se desmorona. El debate nos permitió abordar estas cuestiones tomando incluso contextos de la historia real, acaecida en Estados Unidos hace varias décadas.

LOS INVITAMOS A CONTINUAR EL DEBATE Y A VER OTRA PELICULA IMPERDIBLE “AMELIE”, EL SABADO 20 de MARZO.

Entrada $20 (por favor traer cambio)

¡Los invitamos a participar del debate y continuarlo en forma virtual! Toda opinión será bienvenida, en un clima de respeto y de cordial desacuerdo, cuando lo haya.

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¿La Belleza es "americana"?

El día previo a la entrega de los Oscars proyectamos esta película "multipremiada" y se generó un debate muy interesante. Todo esto sin saber que Argentina ganaría el máximo galardón por "El secreto de sus ojos", dirigida por Campanella, a quien felicitamos con mucha alegría, junto con todo su equipo. No podíamos dejar de mencionarlo conocido el hecho, ¿no les parece?.

En lo que respecta a la película que nos toca... el crujiente impacto de la vida se halla a punto de estallar. El relato es de un fantasma, que reconocía, de algún modo, serlo ya en vida... Por eso nos preguntamos, simplemente cómo vivimos. Eso implica valores, es decir, ¿detrás de qué cosas importantes usamos el tiempo de nuestra vida, que parece eterno, que sabemos finito? Muchas frases quedan para el recuerdo en el film, como la que Ricky Fitts expresa con autosuficiencia: "nunca subestimes el poder de la negación". ¿Eso es lo que muchos hacemos a diario con la muerte o con una vida digna? ¿Cuánto nos negamos, negando nuestra vida? ¿Y que es negar la propia vida, en vida? Es vivir de manera inauténtica, es hacer lo que "nos han dicho que debemos hacer" sin cuestionarlo, a pesar de que "nos duela ese vivir".
Por eso la rebeldía auténtica, lúcida, inmadura, egocéntrica y "corta" de Lester Burnham (Burn = encender, Ham = jamón).
Una mirada optimista nos dice que había comenzado un proceso saludable, para volver a ser sí mismo, no un manojo de mandatos y hábitos vacíos, rutinarios, sin sentido. Lester necesitaba rebobinar. A veces también lo necesitamos nosotros, para retomar, para energizarnos, para andar un nuevo camino, y para madurar. Porque madurar es preciso para decir NO de una manera que nos trasciende, y decir SI a algo por lo que valga la pena vivir.
Porque madurar es un proceso no necesariamente lineal.
¿Y qué de la esperanza? Parece que si el único que dice NO termina muerto, es conveniente seguir diciendo SI a la nada cotidiana, por más que duela a pesar de los manotazos de ahogado que pulsan como expresión de la supervivencia, encarnados en el autoconvencimiento y autoafirmación para no arriesgarse a cambiar de Carolyn Burnham cuya lección más importante de la vida a su hija Jane es que "es imposible depender de otra persona que no sea uno mismo".
La importancia de tenerse a uno mismo ¿debe quedar ahí olvidando que estamos en constante-relación-con-otros e invitando a la desconfianza?
Pululan en el film y, ¿por qué no a nuestros alrededores?, personajes controvertidos: el que parece más lúcido es drug-dealer, el que se dice más recto, es represivo y reprimido y su mujer es un ente que ante la libertad de su hijo Ricky tiene un destello de lucidez. La pequeña Angela Hayes es pura cáscara, pero parece muy segura de sí misma… mientras Jane se va abriendo al “conocer”, con la volubilidad adolescente.

Múltiples facetas, una historia brillante y el rescate de "qué cosas valen la pena en la vida". Podría parecer que ante el vivir una vida vacía, de valores superficiales, materialismo e imagen ficticia se opone un riesgo tan sincero como inevitable, tan peligroso como irrefrenable y e definitiva, una muerte prematura. ¿No es entonces posible una vida feliz?
¿Donde la hallamos? Lester en su último vuelo exalta la vida. Claro, él había comenzado a vivir nuevamente y en ese segundo eterno entre la vida y la muerte alcanzó a expresar lo que es importante... un tiempo en que la felicidad en familia existía, teniendo una mujer feliz, una hija pequeña, recordando la calidez de su abuela... Esa es la belleza que se llevó y que antes de irse para siempre, vino a contarnos en esta película. Y nos dejó una pregunta más: ¿dónde encontramos la belleza en cada una de nuestras vidas?.


Los invitamos el próximo sábado a ver "La Ola", una película alemana, de Dennis Gansel, basada en una historia real.

Entrada $20 (por favor traer cambio)
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Crimen Ferpecto

“Crimen Ferpecto” nos propone un debate sobre los valores y las creencias que sostenemos en medio de la cultura posmoderna, cuando el éxito, la juventud eterna y la inalterable belleza, parecen ser la imposiciones de esta era, para ser en este mundo.

Nos atribulamos pensando en como ser reconocidos por los demás y pasamos horas tratando de "vender"... y de "comprar".

Es la forma que ha tomado para algunos, en nuestros días, la perfección.

El típico exitoso, que se rodea de hermosos y hermosas, que vive una vida de plenitud constante, en donde todo es... perfecto.

¿Perfecto o ferpecto? ¿cuánto cuesta intentar sostener o mostrar una realidad tan aparente como utópica?.

¿Es posible que siempre y para siempre a uno le vaya bien en todas las áreas? ¿Queremos creer que es factible y que el entorno nos ha de abrir lo brazos para abrazarnos amorosamente o para estrangular nuestros deseos como una anaconda, para finalmente devorarnos?

¿Nos preguntamos, que rol tiene el miedo en esta composición? ¿Entre temerosos y temerarios, nos movemos para "autorealizarnos en el sistema"?

¿Qué pasa con nuestras emociones? ¿Qué acciones proponen? ¿Somos nuestros mejores amigos o nuestros mejores verdugos? Muchas preguntas para disfrutar de un debate ferpecto!!

Entrada $20 (por favor traer cambio)

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